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Contra la familia

de esta ficción
querés conservar el lado tibio
el café amargo y a veces dulce
las palabras aferradas a lo banal
         qué tal el clima
          estás durmiendo bien
           ya no te duele ese costado

el retrato en el que por fin se juntaron
                        casi todes
en el que parece el abrazo certero
entre los colmillos y la risa fingida

de esta ficción en que la sangre
es la única amalgama posible
además condicionante más allá
de las continuas molestias
y el trauma

cada quien en otra casa
que reproduce la narrativa
ya cansada y obsoleta

de esta ficción
en la que te tocó
el papel más transparente:

el click en el aparato fotográfico
velándose frente al sol de la tarde


(Obra de Emmanuel Rodriguez Chaves)




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