Ir al contenido principal

Música Propia

Cada cuerpo tiene un ritmo. Cada persona se mueve bajo una música propia que le hace accionar de manera única las válvulas cardiacas. Para algunos esa música es cercana a algo que conocemos como bolero, para otros tendrá algo más fuerte, una salsa o un rock and roll. Pero para una persona en especial que se instala de tanto en tanto en el Parque Central de Alajuela, esa música interna es la de unas maracas.

No sé cómo se llama, tampoco de qué parte de Alajuela es, pero al nombrar los iconos del Parque él es uno de ellos. Por monedas el Maraquero (su nombre para esta columna) ofrece el intercambio perteneciente a una rocola: la canción que escojamos, en su voz, al ritmo de sus maracas. Por su boca se han reproducido desde José Alfredo Jiménez hasta el último éxito en la radio. Todos con su matiz y acorde al talento propio del intérprete. Inclusive atiende ocasiones especiales; canciones de boda, de cumpleaños, de aniversario pueden ser contratadas para celebrar dichas fechas. Además se puede contratar para otras personas, escogiendo la canción y al objetivo (dentro del rango del parque).

Como cada persona, las ciudades y los parques también poseen música. En el caso del Parque Central, además de campas, autos y gente, el recuerdo de esa música se acciona con un par maracas.


William Eduarte para la naciòn

Comentarios

Julia Ardón dijo…
foto, foto!!!
Luis dijo…
Las primeras lineas de este articulo las sacaste de un poema tuyo. Saludos!
Naty dijo…
en ln dónde salen, pa buscar?

Entradas más populares de este blog

El blog como herramienta crítica del escritor

por William Eduarte willaseb@racsa.co.cr http://lagangrena.blogspot.com/ Yo tengo un blog. Mi blog, al que por lo menos le he sido fiel desde que empecé a escribir en medios virtuales es La Gangrena. Ya son casi cuatro años, 279 entradas, algunos comentarios; pero no voy a mentir, soy un blogguero promiscuo. En estos momentos tengo tres blogs, uno para cada atmosfera creativa. Durante este tiempo además, me ha dado por abrir y cerrar estos espacios, inventando nuevos de acuerdo al tema o a la necesidad del momento. Así he pasado por satancons, zoovenir, losmirosinquerermirar, etc. En su mayoría de corta duración y con propósitos bastante concretos: postear textos míos y lograr la distancia suficiente para trabajarlos. Tal vez al principio tenía una necesidad de retroalimentación, ya sea mediante los comments de otros bloggeros o la falta de los mismos. Pero conforme fui experimentando con la herramienta descubrí que este modo de auto publicación virtual lograba separarme realmen

Contra la familia

de esta ficción querés conservar el lado tibio el café amargo y a veces dulce las palabras aferradas a lo banal          qué tal el clima           estás durmiendo bien            ya no te duele ese costado el retrato en el que por fin se juntaron                         casi todes en el que parece el abrazo certero entre los colmillos y la risa fingida de esta ficción en que la sangre es la única amalgama posible además condicionante más allá de las continuas molestias y el trauma cada quien en otra casa que reproduce la narrativa ya cansada y obsoleta de esta ficción en la que te tocó el papel más transparente: el click en el aparato fotográfico velándose frente al sol de la tarde (Obra de Emmanuel Rodriguez Chaves) https://lagangrena.blogspot.com/2023/04/contra-la-familia.html

Tienda por departamentos

  Ellas se hablan entre los pasillos. No se han dado cuenta que un cliente ha entrado. -8 0 , por eso tengo 4 3 dice la más baja de las mujeres entre las camisetas sin mangas para hombres. El cliente hace un calculo rápido: es 3 años mayor. La segunda da dos pasos que la hace encontrarse cerca de los guardarropas; ahí un hombre sostiene dos piezas de ropa y la espera. Yo nací en el 84, piensa. Esta mujer no dice nada, le da una ficha al hombre. En un reflejo se mira unos instantes que le sirven para compararse con su compañera. El cliente, que las ha escuchado, hace lo mismo dentro de un espacio lleno de espejos. Se quita la camisa. Trata de observar al suelo, evadir su torso desnudo. Las mujeres lo ven salir. Él las evade, sientiendose más joven y a la vez más viejo que ellas. Los años tienen una forma rara de acumularse en los cuerpos. Ninguna prenda le ha hecho justicia.