Casi un poema de Gonzalo Rojas por William Eduarte
Yo sangro como un hemofílico
por tus manos;
como si tu voz en el teléfono
me partiera y me tocara tantas veces
que la sangre no tuviera otra forma
mas que los ríos.
Aquí todo es herida,
todo es ausencia;
dolor entre cortado
que sirve a otro dolor
que apenas crece.
Esta es mi casa:
un pozo de mi propia sangre
donde me ahogo
esperando un mensaje
en el contestador automático.
Comentarios